Un equipo de investigadores
estadounidenses advirtió que los cigarrillos electrónicos, diseñados
para ayudar a la gente a dejar de fumar, podría hacerlos más proclives a
consumir otro tipo de drogas más nocivas.
La investigación, publicada en el New England Journal of Medicine,
asegura que los cigarrillos electrónicos no perjudican al corazón y a
los pulmones, como los convencionales, pero sí al cerebro. En ese
sentido, señalan que pese a eliminar los efectos tóxicos del tabaco,
pero emiten nicotina pura altamente adictiva.
Los científicos aseguran que eso altera la bioquímica del cerebro y actúa como puerta de entrada a drogas como el cannabis o la cocaína y sugieren que ese riesgo es especialmente alto en la adolescencia.
Publicado por BBC el Jueves 4 de septiembre de 2014