jueves, 2 de mayo de 2013

El compromiso solidario es preventivo y rehabilitador.


En un programa anterior estuvieron con nosotros dos personas en rehabilitación: Gabriel y Miguel, ambos con nombres de Arcángeles, pero que no eran en nada parecidos a los ángeles cuando recaían: a Gabriel , aunque no lo completó, no le sirvió el tratamiento ambulatorio, recaía frecuentemente en el alcoholismo y la drogadicción, hasta que se internó en el Hogar Madre de Dios. Allá vio personas mucho más necesitadas de apoyo solidario que el apoyo que él mismo necesitaba y comenzó a ayudar en el servicio a esos ancianos que estaban en situación de calle y que esa Casa había acogido, haciendo los servicios más humildes, cuando se defecaban u orinaban, cuando había que bañarlos, etc.; Miguel, había estado 6 años en abstinencia de su alcoholismo y drogadicción después de haber sido dado de alta en el tratamiento ambulatorio que recibió en el Policlínico Obispo Enrique Alvear; pero había recaído y estaba muy rebelde a someterse a otro tratamiento, hasta que accedió a ir al mismo Hogar donde estaba su amigo Gabriel, y, al internarse empezó a ayudar a su amigo en su labor solidaria, descubriendo ambos el sentido de sus vidas al ayudar al prójimo necesitado.



Ambos están viviendo en sus casas, ambos están trabajando y participando en el GAA San José Obrero. Ambos encontraron el sentido de sus vidas en la solidaridad y, como Cristo está en el que sufre, ese contacto con el Señor les hizo experimentar lo que enseñó San Francisco de Asís: “ que dando se recibe” y recibieron la firmeza y perseverancia en su rehabilitación y se hizo más integral y, tal como a ellos les ayudamos, ellos están devolviendo la mano ayudando a otros en red solidaria…..El Papa Juan Pablo II dijo que la solidaridad no es un sentimiento superficial y vago por los males que sufren tantas personas cercanas y lejanas, sino que es una determinación firme y perseverante por trabajar por el bien común, porque todos somos responsables de todos (Solicitudo Rei Socialis)….. Para el cristiano, la solidaridad es el nombre actualizado del amor cuando se proyecta socialmente y de la auténtica caridad. Se la prefiere a la palabra amor que se presta a tanta ambigüedad, y a la palabra “caridad” que, aunque muy profunda, está asociada en su uso a “beneficencia” la cual, a veces, despierta rechazo…. En el Génesis, primero libro de la Biblia, aparece Dios inventando la solidaridad cuando dijo: “Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza”. Y Dios creó al hombre a su imagen los creó varón y mujer (Gen.1,26-27)…. Dios llevó la solidaridad a su punto máximo haciéndose uno con el hombre caído, para que la creatura, de pie, pudiera ejercer la plenitud de su dignidad…

El Documento “Iglesia en América” nos dice que la Encarnación es la mayor prueba de solidaridad de Jesucristo con nosotros…San Pablo añade: “Tengan los mismos sentimientos de Cristo Jesús; o sea, los sentimientos del que siendo Dios, se hizo hombre, niño nacido en un pesebre, al alcance de todos y todas, el que siendo rico se hizo pobre, el que siendo todo poderoso se hizo vulnerable, el que siendo el más puro y santo se puso humildemente en la fila de los pecadores a la espera de ser bautizado, el que se humilló hasta aceptar, por obediencia la muerte y muerte de cruz…Y, por eso, Dios Padre lo exaltó y le dio el nombre que está sobre todo nombre (Rf.Fil.2,5-9)…. Cristo dijo, además, que Él vino a servir y no a ser servido y la solidaridad es un servicio. 

Transcripción de la primera parte del programa radial Familia sin drogas del 17-01-2013, puede descargar y escuchar el programa completo desde el enlace PROGRAMA RADIAL

No hay comentarios:

Publicar un comentario